Una vez más el Evangelio del día me motiva a no sentirme solo, a seguir adelante, a encontrar la fuerza que a ratos falta. La vida sigue su rumbo y si no la tomo, se me pasará sin darme cuenta, como a tantos les pasa y a varios nos ha pasado en alguna etapa.Estos días siguen siendo de reflexión, con algunos frutos, los que Dios me quiere enviar, los que necesito para ser feliz.
Jn 16,32-33
Pero no estoy solo, porque el Padre está conmigo. Os he dicho estas cosas para que tengáis paz en mí. En el mundo tendréis tribulación. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo.

No hay comentarios:
Publicar un comentario